WASHINGTON (AP) -- El plan presupuestario del presidente Donald Trump aún no ha sido publicado, pero eso no ha impedido que algunos de los republicanos más importantes en Washington ya lo estén viendo con recelo.
El borrador de Trump para el año fiscal 2018 saldrá el martes. Seguramente incluirá una ola de recortes a programas de prestaciones sociales como el programa gubernamental de asistencia médica para los pobres o discapacitados Medicaid, cupones de alimentos, pensiones de los empleados federales y subsidios agrícolas.
La propuesta se publicará luego de que se conoció de forma parcial en marzo y que tuvo una acogida impopular. Apuntaba a los presupuestos de agencias nacionales y contemplaba recortes a la ayuda exterior que promediaban un 10%, lo que hizo que varios legisladores de ambos partidos se alejaran.
Los nuevos cortes son impopulares también.
"Creemos que está equivocado", dijo el representante Mike Conaway, presidente de la Comisión de Agricultura de la Cámara de Representantes, cuando se le preguntó acerca de los próximos recortes a los programas agrícolas. "La producción agrícola está en su peor caída desde la depresión, con un desplome del 50% en los ingresos netos de los productores. Ellos necesitan esta red de seguridad", añadió Conaway, republicano por Texas.
El plan presupuestario de Trump promete equilibrar las cuentas federales al final de un plazo de 10 años, incluso si exime de los recortes a las prestaciones de retiro del Seguro Social y el programa gubernamental de asistencia médica para los ancianos Medicare.
Para lograr ese equilibrio, el plan del director de presupuesto de la Casa Blanca, Mick Mulvaney, se basa en cálculos optimistas del crecimiento económico y en un aumento resultante de los ingresos, abandonando la promesa de Trump de un "recorte fiscal masivo".
En cambio, el plan tributario de Trump promete una revisión completa que reduciría las tasas impositivas pero que se basaría en eliminar las exenciones fiscales y en un crecimiento económico.
Trump también está apuntando al programa Medicaid, que también provee atención en casas para ancianos a millones de personas que no podrían pagarla.
La Cámara de Representantes vivió un debate amargo sobre la atención de la salud antes de aprobar a principios de mayo un proyecto de ley de salud del Partido Republicano -por una votación ajustada de 217-213- que incluyó más de 800.000 millones de dólares en recortes de Medicaid durante la próxima década.
Los republicanos clave no están interesados ??en otra ronda de recortes al programa. AP