BEIRUT (AP) -- Siria rechazó el martes las acusaciones estadounidenses de que estaba preparando un ataque con armas químicas, al tiempo que activistas denunciaron un ataque aéreo contra una cárcel del grupo Estado Islámico que habría matado a más de 40 presos.
El Observatorio Sirio para los Derechos Humanos, un grupo activista basado en Gran Bretaña, dijo que por lo menos 15 milicianos murieron también en el ataque aéreo ocurrido el lunes en la provincia de Deir El-Zour. La emisora Deir Ezzor 24, patrocinada por activistas, dijo que la cifra de civiles muertos ascendía a 60.
Ambas agrupaciones atribuyeron el bombardeo a la coalición liderada por Estados Unidos. Rusia y Siria también efectúan bombardeos en Deir el-Zour, y no quedaba claro cómo los activistas sabrían de qué país era la aeronave responsable. No se pudo contactar de inmediato a la coalición para que dé su comentario.
Ali Haidar, ministro sirio de reconciliación nacional, rechazó el lunes la advertencia de la Casa Blanca contra el gobierno del presidente Bashar Assad, de que no vuelva a lanzar otro ataque con armas químicas. Haidar dijo a la AP que las acusaciones no eran más que el preámbulo de otra campaña diplomática contra Siria en la ONU.
El gobierno ruso también rechazó la declaración de la Casa Blanca, que le había advertido al gobierno de Assad que ?lo pagará caro? si lanza otro ataque con armas químicas.
?Tales amenazas contra los líderes legítimos de Siria son inaceptables?, dijo el portavoz del presidente ruso Vladimir Putin, Dmitry Peskov.
Rusia es la principal fuente de apoyo para Assad, y le respaldó cuando negó haber sido el responsable de un ataque con armas químicas que mató a decenas de personas en la provincia de Idlib el 4 de abril. Días después, Estados Unidos lanzó misiles contra una base militar siria como represalia.
Peskov criticó a Estados Unidos por utilizar la frase ?otro ataque con armas químicas?, recordando que nunca se realizó una investigación independiente del suceso de abril, a pesar de Rusia lo pidió. AP