Washington, 5 sep (EFE).- El presidente de EE.UU., Donald Trump, puso hoy fin al plan conocido como DACA, promulgado por su predecesor, Barack Obama y que ha protegido de la deportación a 800.000 indocumentados, aunque la suspensión se hará efectiva dentro de seis meses para forzar al Congreso a encontrar una alternativa.
El anuncio, tras semanas de deliberaciones, supone un fuerte golpe para la comunidad inmigrante de Estados Unidos, especialmente porque fue retratado por la Casa Blanca como una decisión que prioriza los empleos y la seguridad de los "trabajadores ciudadanos estadounidenses".
"Antes de preguntarnos qué es justo para los inmigrantes ilegales, debemos de preguntarnos qué es justo para las familias estadounidenses, para los estudiantes, para los contribuyentes y para los que buscan empleo", consideró Trump en un comunicado distribuido por la Casa Blanca.
Trump, sin embargo, reiteró que encarará "con corazón y compasión" la situación de los miles de indocumentados que se beneficiaron del programa de Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA) y pudieron frenar su deportación, obtener un permiso temporal de trabajo y, en algunos estados, una licencia de conducir.
"Como he dicho antes, resolveremos el tema de DACA con corazón y compasión, pero a través del proceso democrático legal, mientras al mismo tiempo nos aseguramos de que cualquier reforma migratoria que adoptamos ofrece beneficios duraderos para todos los ciudadanos estadounidenses", destacó.
"Debemos tener corazón y compasión para los estadounidenses desempleados, que luchan y han sido olvidados", añadió el mandatario, en un claro guiño a la clase trabajadora.
De esa forma, el presidente cumplió con una de sus principales promesas de campaña y atendió el llamado de los fiscales generales de nueve estados conservadores, encabezados por Texas y que habían amenazado con interponer hoy mismo una demanda contra el Gobierno si no derogaba el programa.
La decisión de Trump no entrará en vigor hasta el 5 de marzo de 2018, dentro de seis meses, periodo en el que el Congreso, el único con poder para cambiar el sistema migratorio, debe encontrar una solución para regularizar la situación de los jóvenes indocumentados, conocidos como "soñadores" (dreamers).
El presidente de la Cámara de Representantes de EE.UU., el republicano Paul Ryan, que la semana pasada pidió a Trump mantener DACA, anunció hoy que buscará consenso con los líderes del Senado para aprobar una ley migratoria, un proyecto que ha fracasado en anteriores ocasiones debido a los desacuerdos entre demócratas y republicanos.
Actualmente, el Congreso está debatiendo diferentes propuestas migratorias, entre las que destaca un proyecto legislativo que ha conseguido el respaldo de Trump y que propone reducir a la mitad el número de inmigrantes que consiguen la residencia permanente, permiso conocido como "green card" (tarjeta verde).
Hasta que se apruebe una ley, aquellos que están inscritos en el programa DACA podrán usar sus permisos de trabajo hasta que expiren, pero si esos permisos acaban antes del 5 de marzo, entonces deben renovarlos antes del 5 de octubre, según informó hoy el Departamento de Seguridad Nacional, con competencias en inmigración.
Las peticiones para renovar la inscripción a DACA que hayan sido recibidas antes de hoy serán evaluadas de manera individual y podrían concederse extensiones, precisaron en una rueda de prensa telefónica altos funcionarios del Departamento de Seguridad Nacional, que pidieron el anonimato.
Los agentes fronterizos seguirán dando prioridad a la deportación de aquellos inmigrantes con antecedentes penales, por los que los "soñadores" tendrán en los próximos meses el mismo trato que habían recibido hasta ahora por las autoridades migratorias, según dijo el propio Trump en su comunicado.
El encargado de anunciar hoy el fin de DACA no fue Trump, sino su fiscal general, Jeff Sessions, uno de los miembros del Ejecutivo con posiciones más duras en inmigración.
Sessions se encargó de evaluar la legalidad del programa y concluyó que era "inconstitucional" porque Obama había abusado de su poder ejecutivo, unas conclusiones que transmitió este lunes a la secretaria en funciones del Departamento de Seguridad Nacional, Elaine Duke.
Duke rescindió hoy el memorándum que creó DACA el 15 de junio de 2012 y, con esa acción, el programa quedó en suspenso.
Trump dice ahora que revisará la situación de "soñadores" si el Congreso no actúa
Washington, 5 sep (EFE).- El presidente de EE.UU., Donald Trump, dijo hoy que "revisará" la situación de los jóvenes indocumentados conocidos como "soñadores", cuya protección suspendió esta misma mañana, si el Congreso no actúa en el plazo dado de seis meses.
"El Congreso tiene ahora 6 meses para legalizar DACA (algo que el Gobierno de Obama no pudo hacer). Si no pueden, ¡revisaré este asunto!", dijo Trump en un mensaje a través de su cuenta de Twitter.
Trump puso hoy fin a este programa promovido por el expresidente Obama, conocido como DACA y que ha protegido de la deportación a 800.000 indocumentados desde 2012.
Sin embargo, la suspensión se hará efectiva dentro de seis meses para forzar al Congreso a encontrar una alternativa.
"Como he dicho antes, resolveremos el tema de DACA con corazón y compasión, pero a través del proceso democrático legal", destacó en un comunicado.
La suspensión de DACA ha provocado un alud de críticas a Trump desde el propio Obama, que la calificó de "cruel", a destacados líderes del mundo empresarial y las organizaciones proderechos civiles
Obama afirma que la suspensión de DACA es "cruel" y "errónea"
Washington, 5 sep (EFE).- El expresidente estadounidense Barack Obama lamentó hoy que se haya arrojado "una sombra" sobre miles de inmigrantes con el fin del programa DACA, que protegía de la deportación a 800.000 jóvenes indocumentados, y tildó la decisión adoptada por su sucesor, Donald Trump, de "cruel" y "errónea".
"Una sombra se ha arrojado sobre algunos de nuestros mejores y más brillantes jóvenes. Apuntar a estos jóvenes es erróneo (...) y es cruel", afirmó en un comunicado Obama, quien promulgó el programa de Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA) en 2012 mediante una orden ejecutiva.
A su juicio, la decisión de Trump de derogar DACA y pasar la responsabilidad al Congreso es de carácter "político".
"Sean cuales sean las preocupaciones y quejas que los estadounidenses puedan tener sobre la inmigración en general, no deberíamos amenazar el futuro de este grupo de jóvenes que están aquí sin haber cometido una falta, no suponen una amenaza y no están arrebatando nada del resto de nosotros", explicó Obama en su contundente nota de rechazo, divulgada en su página de Facebook.
Por ello, el exmandatario subrayó que la cuestión de los "soñadores", como se conoce a estos jóvenes indocumentados que llegaron a EE.UU. como niños, versa "en último término, sobre la "decencia básica".
"Esta cuestión se resume en si somos gente que echamos de una patada a los jóvenes esperanzados que se esfuerzan fuera de EE.UU., o si los tratamos del modo que querríamos que se tratase a nuestros hijos", agregó.
"Se trata de quiénes somos como pueblo, y quién queremos ser", indicó Obama, quien dejó la Casa Blanca en enero de este año después de alcanzar la Presidencia en 2009.
Esta mañana, el fiscal general de EE.UU., Jeff Sessions, anunció oficialmente la decisión, aunque agregó que la suspensión se hará efectiva dentro de seis meses, para forzar al Congreso a encontrar una alternativa. EFE USA