LONDRES (Reuters) - El exprimer ministro británico Tony Blair dijo el jueves a los votantes que se estaba acabando el tiempo para revertir el Brexit, que consideró un error que mermaría la influencia de Reino Unido y lamentarían las próximas generaciones.
Más de un año y medio después de la votación del Brexit en 2016, Reino Unido sigue profundamente dividido sobre la salida planificada de la Unión Europea (UE) que la primera ministra Theresa May dice que tendrá lugar el 29 de marzo de 2019.
Tanto los opositores como los partidarios del Brexit están de acuerdo en que el “divorcio” es el movimiento geopolítico más importante desde la Segunda Guerra Mundial, aunque imaginan un futuro muy diferente para la economía británica de 2,5 billones de dólares y la UE, el mayor bloque comercial del mundo.
Blair, primer ministro laborista desde 1997 hasta 2007, dijo que Reino Unido sería más pobre y más débil, y advirtió que May no había resuelto ninguno de los problemas sobre el estatus que tendrá Irlanda del Norte después del Brexit.
“Estamos cometiendo un error que el mundo contemporáneo no puede entender y que no perdonarán las generaciones del futuro”, dijo Blair en un artículo publicado en su sitio web el jueves.
“2018 será la última oportunidad para asegurar que la nueva relación propuesta con Europa sea mejor que la existente”, dijo Blair, de 64 años.
Salir de la Unión Europea se consideraba descabellado hace poco más de 15 años. Entonces los líderes británicos como Blair discutían sobre cuándo unirse al euro, y hablar de una salida de la UE se reservaba a los escépticos al margen de los dos principales partidos.
Pero la agitación de la crisis de la zona euro, los temores en Reino Unido sobre la inmigración y una serie de cálculos erróneos del exprimer ministro David Cameron llevaron a Reino Unido a votar con un 52 por ciento a favor del Brexit en el referéndum de junio de 2016.
Blair ha pedido en repetidas ocasiones que se revierta el Brexit, haciéndose eco de otros de sus detractores, como el presidente francés Emmanuel Macron y el inversor multimillonario George Soros, que han sugerido que Reino Unido todavía podría cambiar de opinión. Brexit