WASHINGTON (AP) — El presidente Donald Trump visitó el Capitolio el miércoles para tratar de mantener en línea a los legisladores republicanos en el día 19 del cierre parcial del gobierno. Trump insinuó que podría estar cerca un acuerdo por los fondos que quiere para el muro fronterizo entre México y Estados Unidos, pero agregó que el cierre duraría “lo que tenga que durar”.
Aparte del comentario cautelosamente optimista de Trump, hubo pocas evidencias de que el fin del estancamiento por los miles de millones que el presidente exige para el muro esté cerca de concretarse. Sostuvo que tiene un apoyo “tremendo” de parte de los republicanos, pero varios senadores de ese partido han mostrado su inconformidad públicamente ahora que el estancamiento afecta negativamente a trabajadores estadounidenses e interrumpe la economía.
Trump insistió en la Casa Blanca que él “no quería esta pelea”. Sin embargo, fue su repentino rechazo de un proyecto bipartidista de ley de gastos a finales del mes pasado lo que sorprendió a los líderes del Congreso, incluso a los aliados republicanos, que ahora buscan una resolución al cierre causado por los fondos que quiere para el muro, una de sus propuestas de campaña más emblemáticas.
Antes de su visita al Capitolio y otra ronda de conversaciones el miércoles en la Casa Blanca, Trump hizo su comentario sobre un posible acuerdo. Al mismo tiempo, renovó su advertencia de que podría declarar una emergencia nacional y tratar de autorizar el muro por su cuenta si el Congreso no aprueba los 5.700 millones de dólares que él está pidiendo.
“Creo que podríamos llegar a un acuerdo, pero si no lo hacemos, podríamos ir por ese camino”, comentó.
Cada vez hay más preocupaciones por los efectos del cierre en los trabajadores estadounidenses comunes y corrientes, incluso la interrupción de pagos a agricultores y problemas para compradores de casas que buscan préstamos hipotecarios respaldados por el gobierno: “una cosa seria”, de acuerdo con el senador federal John Thune, el republicano número dos en el Senado.
La senadora Lisa Murkowski, republicana por Alaska, exhortó a sus colegas a aprobar iniciativas de gastos que reabran varias agencias, “de tal manera que ya sea el Departamento del Interior o el IRS, esos trabajadores puedan reanudar sus tareas. Me gustaría ver eso”. IRS son las siglas en inglés del Servicio Interno de Impuestos del Departamento del Tesoro.
El senador John Cornyn, republicano por Texas, dijo que el estancamiento era “completamente innecesario y forzado. La gente espera que su gobierno trabaje... Obviamente esto no está funcionando”.
El miércoles, Trump iba a escuchar de primera mano las preocupaciones _y quizás dudas sobre su estrategia_ de sus copartidarios en el Capitolio.
Al igual que otros republicanos, la senadora Shelley Moore Capito, de Virginia Occidental, dijo que ella apoyaba la seguridad fronteriza, pero agregó que la pelea por el cierre “de ninguna manera” podría durar años, tal como Trump dijo la semana pasada. En busca de apoyo, Trump visita republicanos en Capitolio