KIEV Aug 23 (Reuters) - - La canciller alemana Angela Merkel voló el sábado la capital ucraniana y dijo que quería ayudar a terminar con la crisis, que subió de intensidad tras el envío en la víspera de un convoy de camiones rusos a Ucrania sin el permiso de Kiev.
Muchos de los camiones ya han regresado a Rusia, lo que ha aliviado la tensión provocada por lo que los gobiernos occidentales calificaron ayer de incursión ilegal en Ucrania.
En su primera visita a Ucrania desde que comenzó el conflicto hace cuatro meses en el este del país entre separatistas prorrusos y fuerzas del Gobierno, Merkel ha viajado al país para mantener conversaciones con el presidente ucraniano Petro Poroshenko.
En unas breves declaraciones al comienzo de las negociaciones, la canciller germana dijo que llegaba a Kiev "en un momento complicado concentrado en la unidad y en la integridad territorial de Ucrania".
"Espero que seamos capaces de debatir problemas bilaterales así como el camino hacia la paz, que hay que encontrar", dijo.
Horas antes de su aterrizaje en Kiev, hubo un fuerte fuego de artillería en Donetsk, el principal bastión separatista en el este de Ucrania. Reporteros de Reuters vieron apartamentos destruidos y charcos de sangre en los que, según residentes, murieron dos civiles.