La canciller alemana, Angela Merkel, se reunió con el presidente ucraniano, Petro Poroshenko, al margen de la cumbre Europa-Asia en Milán. Otros líderes europeos participarán en negociaciones más amplias este viernes.
Al margen de la cumbre cumbre Europa-Asia (ASEM), la canciller alemana, Angela Merkel, y el presidente ucraniano, Petro Poroshenko, se mostraron decepcionados por la evolución del conflicto ucraniano. "Ambos lamentaron que muchas cosas aún no se han implementado, por ejemplo, en relación a un cese del fuego duradero", comunicó esta noche en Milán un portavoz del gobierno alemán, tras el encuentro entre ambos mandatarios. Además, el vocero mencionó las elecciones locales en Donetsk y Lugansk así como la vigilancia de la frontera entre Rusia y Ucrania como tareas pendientes.
Negociaciones más amplias
Poroshenko, por su parte, se reunió además con el presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, y el presidente de la Comisión Europea, Jose Manuel Durao Barroso, así como con el primer ministro italiano, Matteo Renzi. Merkel tenía previsto sondear con Poroshenko y Putin las posibilidades de hallar una solución pacífica al conflicto entre Rusia y Ucrania con vistas a la ronda de negociaciones más amplia prevista para este viernes a las 08:00 hora local, donde el jefe del Kremlin y Poroshenko se sentarán a la mesa junto a Merkel, el primer ministro británico, David Cameron; el presidente francés, François Hollande; el primer ministro italiano, Matteo Renzi, y las cúpulas de la Unión Europea.
Se trata de la primera gran reunión de políticos occidentales con Putin desde que se vieran en junio en Normandía. Esta noche de jueves, Merkel se reunió con Putin para organizar el encuentro, pero no trascendieron informaciones sobre el contenido del diálogo.
"Nueva Guerra Fría"
Previamente, en una entrevista con medios serbios que el Kremlin difundió antes del viaje a Italia, Putin dijo sobre el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, y las sanciones estadounidenses contra Moscú que "es difícil calificar este accionar de otra cosa que no sea hostil". Los aliados de Rusia deberían comprender que "los intentos de extorsión no tienen sentido", añadió. Putin advirtió que la disputa entre potencias atómicas tiene consecuencias para la estabilidad global y afirmó que Estados Unidos también es responsable de la guerra civil en Ucrania pero ahora quiere atribuir toda la responsabilidad a Rusia.
Occidente acusa a Rusia de haber anexado la península de Crimea violando el derecho internacional y de estar apoyando a los separatistas prorrusos en el este de Ucrania. Por eso, impuso duras sanciones económicas a Moscú. Un repliegue parcial de tropas rusas de la zona fronteriza con Ucrania hace pocos días supuso un principio de esperanza de una distensión en la crisis más grave que vive Europa desde la Guerra Fría.
El Premio Nobel de la Paz Mijail Gorbachov, en tanto, reclamó a Occidente que ponga fin a las sanciones. "Nadie debe mezclarse en una nueva Guerra Fría", advirtió el ex presidente soviético en el diario gubernamental "Rossiyskaya Gaseta".