A falta de confirmación por el Senado, más que probable, ya que no pertenece al círculo más estrecho de Obama, Loretta Lynch sería la primera mujer afroamericana en un ocupar el cargo.
Lynch, de 55 años, fue nombrada por el expresidente Bill Clinton como fiscal federal en Brooklyn entre 1999 y 2001, y desde 2010 ocupaba el mismo puesto por designación de Obama. El actual presidente de Estados Unidos la ha nominado hoy (08.11.2014) para sustituir a Eric Holder como fiscal general del país. De ser confirmada por el Senado, la fiscal federal de Nueva York será la primera mujer afroamericana en ocupar el máximo cargo en el Departamento de Justicia.
Lynch no pertenece al círculo más estrecho de Obama, quien espera así evitar el rechazo de la nominación por parte de los republicanos, que ya controlan las dos cámaras en el Congreso. Aún está abierta la fecha en la que la funcionaria podrá tomar posesión del cargo. Obama quiere que el proceso de confirmación se realice antes de que comience a sesionar el nuevo Congreso en enero.
El presidente elogió a Lynch como una jurista independiente, que impulsó procesos contra terroristas, mafiosos y funcionarios públicos corruptos. Además, es una luchadora incansable por los derechos civiles. No le gustan los titulares sino "la sustancia", dijo Obama durante la nominación oficial.
Reacción positiva, pero cauta
Las primeras reacciones del ala conservadora al nombramiento de Lynch fueron cautelosamente positivas. El republicano de más alto rango en el Comité Judicial del Senado, Charles Grassley, anticipó que se realizará un "examen justo y a conciencia". De la misma opinión fue Mitch McConnell, el futuro líder de la mayoría en la cámara alta. Sin embargo, subrayó que sería conveniente que el proceso de confirmación se llevara a cabo con el nuevo Senado.
Al igual que Obama, también sus colaboradores describen a Lynch como a una mujer muy trabajadora a la que no le gusta el show. De hecho, su nombre no era muy conocido fuera de círculos judiciales, a pesar de llevar adelante numerosos procesos en los que desempeñó un papel preponderante. Lynch es sobre todo conocida por casos de delincuencia organizada, terrorismo, fraude y soborno. También fue abogada de la parte acusadora en el juicio contra varios agentes de la policía en 1997 que habían maltratado severamente a un imigrante de Haití.