LONDRES (Reuters) - El futuro político de la ministra de Desarrollo Internacional de Reino Unido, Priti Patel, quedó en duda el miércoles por las reuniones que mantuvo en privado con funcionarios israelíes, lo que representa un nuevo desafío para la autoridad de la primera ministra Theresa May en momentos en que negocia el Brexit.
Más débil que nunca después de que su partido perdió la mayoría parlamentaria en las elecciones de junio, May afronta una nueva crisis luego de la renuncia de su ministro de Defensa por un escándalo de acoso sexual, lo que dejó a su Gobierno “hediendo a muerte”, de acuerdo a un legislador de la oposición.
Patel, quien hizo campaña a favor del Brexit y cuyas posturas están en línea con las del Partido Conservador, se dirigía a Londres después de cancelar reuniones en un previsto viaje a África, dijo un funcionario de su Departamento de Desarrollo Internacional.
Consultado sobre si sería removida del cargo, el legislador conservador Crispin Blunt, expresidente de un influyente comité de asuntos exteriores, dijo a Reuters que “esto es un asunto para la primera ministra”.
Patel se disculpó con May el lunes por no informarle que sostuvo reuniones con altos funcionarios israelíes, incluyendo al primer ministro Benjamin Netanyahu, durante un festivo, lo que violó la norma de mantenerse alejada de temas que competen exclusivamente al Ministerio de Relaciones Exteriores.
El miércoles, el diario Sun reportó que la ministra tampoco informó que se reunió con el director general del Ministerio de Relaciones Exteriores israelí, Yuval Rotem, en Nueva York, y con el ministro de Seguridad Pública Gilad Erdan, en Londres.
Una fuente del Gobierno confirmó que esos encuentros se llevaron a cabo. Añadió que ningún funcionario de la administración británica estuvo presente en esas discusiones y que éstas fueron programadas contraviniendo los procedimientos habituales.
La semana pasada, el ministro Michael Fallon, un cercano aliado de May, se vio obligado a renunciar por un escándalo de acoso sexual en el Parlamento.
La pérdida potencial de otro ministro debilitará aún más a May, que ha tenido problemas con avanzar en las negociaciones para que Reino Unido deje la Unión Europea y enfrenta críticas por la manera en que ha manejado los asuntos internos del país, desde el letal incendio en un edificio de apartamentos este año a las denuncias en curso sobre acoso sexual. May Brexit