NUEVA YORK (AP) — El fiscal general de Nueva York Eric Schneiderman, que ha desempeñado un papel destacado en pro de las mujeres y como opositor al presidente Donald Trump, anunció el lunes por la noche que renunciará horas después de que cuatro mujeres con las que sostuvo romances lo acusaron de violencia física en testimonios publicados por la revista The New Yorker.
Schneiderman, que intentaba ser reelegido, dijo que refuta las versiones de las mujeres y que “aunque estas acusaciones no están relacionadas con mi conducta profesional ni con las operaciones de la oficina, realmente me impedirán encabezar el trabajo de la oficina en esta época crucial”. Dijo que el martes renunciará al concluir el horario laboral.
Dos de las mujeres dieron a conocer sus nombres e indicaron que Schneiderman, de 63 años, las golpeó repetidas veces durante el tiempo que estuvieron involucradas con él en los últimos años, y que no fue con su consentimiento. Ninguna de las dos lo denunció ante la policía, pero ambas dijeron que buscaron atención médica y le contaron sobre el maltrato a personas cercanas.
Una tercera mujer que también mantuvo una relación con el fiscal les contó su historia a las otras dos mujeres, pero indicó que tenía demasiado miedo como para hacerlo públicamente. Una cuarta dijo que Schneiderman la abofeteó cuando lo rechazó, pero también pidió permanecer en el anonimato.
The New Yorker señaló que investigó las acusaciones de la tercera mujer, y vio una fotografía de lo que la cuarta dijo que fue la herida que el fiscal le provocó.
Tras conocerse las acusaciones, el gobernador de Nueva York, el demócrata Andrew Cuomo, pidió una investigación y la renuncia inmediata de Schneiderman.
Las dos mujeres que revelaron sus nombres, Michelle Manning Barish y Tanya Selvaratnam, señalaron que el maltrato físico fue aumentando con el tiempo _lo que incluyó golpes e intentos de asfixia_ y que Schneiderman también bebía mucho. The Associated Press mencionó las identidades de ellas dos porque ambas acordaron contar sus historias de manera pública.
Luego de que se publicó la historia, Manning Barish dijo en Twitter: “Después del mes más difícil de mi vida hablé. Por mi hija y por todas las mujeres. No podía permanecer callada y alentar a otras mujeres a que fueran valientes en mi lugar. No podía...”.
Cuando se le pidió comentar al respecto, el demócrata Schneiderman envió un comunicado a The New Yorker en el que indicó que “en la privacidad de las relaciones íntimas he participado en juegos de roles y en otras actividades sexuales consensuadas. No he atacado a nadie. Nunca he tenido relaciones sexuales no consensuadas, que es una línea que no cruzaría”.
Sus representantes enviaron el mismo comunicado a The Associated Press cuando se les preguntó sobre las acusaciones. También mandaron un comunicado de su exesposa, Jennifer Cunningham, quien dijo: “He conocido a Eric por casi 35 años como esposo, padre y amigo. Estas acusaciones son completamente incongruentes con el hombre que conozco, quien siempre ha sido alguien del más alto carácter, con valores excepcionales y un padre amoroso. Encuentro imposible creer que estas acusaciones sean verdaderas”.
En su comunicado, Cuomo dijo: “Nadie está por encima de la ley, incluido el máximo funcionario legal de Nueva York. Le pediré al fiscal de distrito adecuado de Nueva York que inicie una investigación, y proceda según amerite”.
Schneiderman ha respaldado el movimiento #YoTambién contra los abusos sexuales y también ha criticado a Trump desde hace tiempo. AP