A una semana del inicio del Mundial de fútbol en Rusia, el presidente Vladimir Putin afirmó este jueves que el país va por buen rumbo y reiteró su objetivo de aumentar la esperanza de vida de sus compatriotas, reducir la pobreza y situarse entre las cinco primeras economías del mundo.
Como cada año, Putin respondió a todo tipo de preguntas en el programa "Línea Directa" de la televisión rusa. Habló desde la evolución del precio del combustible hasta el destino de los costosos estadios construidos para el Mundial de fútbol.
Antes de responder a las preguntas de los ciudadanos, Putin reafirmó los objetivos de su nuevo y cuarto mandato presidencial, que termina en 2024.
"En conjunto, avanzamos en la dirección correcta", dijo Putin, que destacó una perspectiva de "crecimiento duradero de la economía" con una inflación "históricamente baja".
"Por supuesto, tenemos que solucionar determinados problemas", agregó Putin. Desde 2014, Rusia enfrenta sanciones económicas de los países occidentales debido a la crisis ucraniana.
Cada año, Putin promete en "Línea Directa" solucionar los problemas cotidianos de los rusos, hace confidencias sobre su vida privada, rezonga en directo a los responsables de las regiones y se permite algunas bromas.
Más de dos millones de rusos enviaron preguntas a Putin, según cifras publicadas por el canal de televisión Rossia 24, organizadora del programa.
El presidente abordó también las tensiones con los occidentales, con quienes las relaciones están lastradas por los desacuerdos persistentes sobre Siria y Ucrania, las acusaciones de injerencia y el envenenamiento del exespía ruso Serguéi Skripal en Inglaterra.
"Es el momento de sentarse a la mesas de negociaciones y no solamente para reflexionar, sino para desarrollar esquemas adecuados y modernos a favor de la seguridad internacional y europea", aseguró.
Las acusaciones occidentales "son una manera de contener a Rusia, como las sanciones", criticó.
- Un supermisil -
En el terreno de las armas, Putin anunció que el sistema de misiles estratégicos hipersónicos "Avangard" desarrollado por Rusia y que él mismo había presentado en marzo entrará en servicio en 2019.
"Es un sistema de misil intercontinental, no balístico. Es el arma absoluta (...) Vuela a 20 veces la velocidad del sonido. No creo que un solo país disponga de tal arma en los próximos años. Nosotros la tenemos ya", afirmó.
"Está claro que debemos defender nuestras intereses económicos y de seguridad", añadió el presidente.
Putin explicó que "no piensa" canjear al cineasta ucraniano Oleg Sentsov, encarcelado en Rusia por "terrorismo" y cuya detención es denunciada por Kiev, la Unión Europea (UE) y Estados Unidos, por el periodista de la agencia de prensa rusa Kyrylo Vychynski, detenido a finales de mayo en Kiev.
Este año, Putin introdujo una novedad, llamando en directo por videoconferencia a los responsables regionales y ministros para que se explicaran sobre las preguntas y quejas hechas por los ciudadanos.
Le tocó estrenar ese dispositivo al ministro de Energía, Alexandre Novak, que tuvo que responder a una incisiva pregunta sobre el aumento de los precios de los combustibles.
"Presidente, el 18 de marzo todo el país votó por usted y es incapaz de frenar el alza del combustible", preguntó el telespectador Alexéi.
En cuanto al Mundial que arranca el jueves 14 de junio, Putin afirmó que se hará todo lo necesario para rentabilizar los estadios, algunos en ciudades con escasa tradición futbolística, cuya construcción costó 13.000 millones de dólares.
La mayoría de las preguntas hechas durante el programa tenían que ver con las dificultades económicas tras años de crisis.
La caída del precio del petróleo y las sanciones occidentales hundieron el poder adquisitivo y los ingresos de la población.
A pesar del crecimiento, la pobreza, que progresó durante la recesión, no retrocedió en 2017.
El año pasado, el 13,2% de los rusos, el equivalente de 19,3 millones de personas, tenían un ingreso inferior al umbral de pobreza. Putin