WASHINGTON (AP) — Los republicanos en la Cámara de Representantes sufrieron el jueves la partida prematura de otro correligionario, restándoles aún más sus posibilidades de quitarles el control del recinto a los demócratas en las elecciones de 2020, en una época en la que resienten su condición de minoría, la polarización de los legisladores y los tuits y rabietas del presidente Donald Trump.
El representante Will Hurd, de 42 años, de tendencia moderada que ha sostenido discusiones con Trump, anunció en un tuit que no buscará la reelección el año entrante. Hurd es el noveno republicano en la cámara baja y el sexto en poco más de una semana que anuncia su próxima partida, situación que aumenta las posibilidades de los demócratas de ganar un distrito fronterizo con México y de población mayoritariamente hispana.
La partida del único republicano negro en la Cámara de Representantes dejó mal parado al Partido Republicano luego de que 34 de sus miembros se fueron antes de las elecciones pasadas, la cifra más alta de esa fuerza política desde al menos 1930.
Los republicanos dijeron no esperar que las nuevas dimisiones alcancen esa dimensión, aunque su mayor problema es la partida de varios legisladores jóvenes como Hurd, quien está en su tercer periodo. Estas salidas quizá pongan en peligro cuatro bancas republicanas en 2020 y dejan entrever una inquietud subyacente al interior del partido sobre la dura realidad de continuar en la Cámara de Representantes.
“Existe un estado de ánimo de gran frustración por la falta de logros”, afirmó el representante republicano Paul Mitchell en una entrevista esta semana, días después de que sorprendiera a sus colegas con su anuncio de que se retiraría después de apenas dos periodos en la cámara baja. ”¿Para qué correr como loco cuando lo más que se puede esperar quizá sea ver algún cambio en los márgenes de diferencia (de votos)?”
Mitchell, de 62 años, quien dijo que en un principio tenía la intención de ser legislador por más tiempo, responsabilizó a los dirigentes de ambos partidos de aprovechar los problemas de la nación “como un medio para enviar mensajes con miras a las elecciones” en lugar de resolverlos.
Expresó también su frustración porque Trump dijo el mes pasado en tuits a cuatro legisladoras demócratas de origen minoritario, incluida la representante Rashida Tlaib, que “regresen” a sus países, aunque todas son estadounidenses. El tuit estuvo “por abajo del comportamiento de liderazgo que guiará a este país hacia un lugar mejor”, declaró Mitchell.
En un comunicado, Hurd no mencionó a Trump pero señaló enfáticamente que él se aferró a su escaño “cuando el ambiente político era abrumadoramente adverso para mi partido”. AP
ARCHIVO - En esta fotografía de archivo del 23 de octubre de 2018, el representante republicano Will Hurd posa para una foto durante un evento en la Universidad Texas A&M en San Antonio. (AP Foto/Eric Gay)