viernes, 2 de agosto de 2019

Los jefes diplomáticos de Seúl-Washington-Tokio se reunirán en medio del impulso de Tokio para la exclusión de Corea del Sur la lista blanca

Bangkok, 2 de agosto (Yonhap) -- Los jefes diplomáticos de Corea del Sur, Estados Unidos y Japón tienen previsto reunirse trilateralmente este viernes, dado que el intento de Tokio de eliminar a Seúl de su estatus comercial preferencial está ensombreciendo la cooperación de seguridad tripartita a pesar de la belicosa Pyongyang.

La ministra de Asuntos Exteriores de Corea del Sur, Kang Kyung-wha, y sus homólogos de Estados Unidos y Japón, Mike Pompeo y Taro Kono, planean celebrar diálogos a las 4:30 p.m. (hora local) en Bangkok, al margen de las reuniones multilaterales que involucran a la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN, según sus siglas en inglés).

Es probable que la reunión tenga lugar después de que Japón mantenga una reunión del Gabinete para concretar la decisión de eliminar a Corea del Sur de la "lista blanca" de 27 países con trato especial en la compra de productos de doble uso japoneses que pueden ser desviados para fines militares.

La decisión agravaría las ya altas tensiones causadas por la medida de control de exportaciones, tomada el 4 de julio por Tokio contra Seúl, y obstaculizaría las esperanzas para una cooperación de defensa más estrecha entre EE. UU. y sus aliados asiáticos clave, tras los lanzamientos de proyectiles de Corea del Norte del miércoles y viernes.

En los diálogos, Pompeo tiene previsto redoblar los llamamientos para que Seúl y Tokio alivien las tensiones y centrarse en los esfuerzos conjuntos para hacer frente a los retos de seguridad de Pyongyang y promover una paz duradera en la península dividida.

Washington ha indicado su voluntad para el compromiso o una mediación total para facilitar los esfuerzos de Seúl y Tokio para elaborar una solución diplomática a su creciente disputa comercial.

Antes de la reunión trilateral, Pompeo planea reunirse bilateralmente con Kono y luego con Kang.

Durante sus diálogos bilaterales del jueves, Kang y Kono solo reconfirmaron sus diferencias en la disputa comercial y diplomática, reforzando las expectativas de que Japón prosiga con su plan de retirar a Corea del Sur de la lista blanca.

Seúl considera la medida de control de las exportaciones de Tokio como una represalia política por las sentencias del Tribunal Supremo surcoreano, del año pasado, que ordenó a las firmas japonesas compensar a las víctimas surcoreanas por el trabajo forzado durante la colonización de la península coreana de Japón en 1910-45.

Japón argumenta que todos los temas de indemnización derivados de su colonización del pasado fueron resueltos bajo un acuerdo de 1965 con el fin de normalizar los lazos bilaterales, y que las sentencias del tribunal van en contra de dicho acuerdo. Sin embargo, el Tribunal Supremo reconoció el derecho individual de las víctimas a reclamar daños y perjuicios.

Kang tiene previsto asistir, este viernes, a una reunión de la ASEAN+3, que involucra a Corea del Sur, China y Japón; la sesión de la Cumbre de Asia Oriental; y el Foro Regional de la ASEAN. Se espera que en dichas reuniones subraye que las restricciones de exportación de Japón van en contra de los principios del libre comercio, un motor clave de la prosperidad compartida en la región. YONHAP