BIRMINGHAM, Inglaterra, 21 nov (Reuters) - El líder del opositor Partido Laborista británico, Jeremy Corbyn, reveló el jueves un programa electoral de corte socialista radical para el Gobierno de Reino Unido que incluye un aumento del 5% en los salarios del sector público, mayores impuestos a las empresas y una amplia nacionalización de las infraestructuras.
Los votantes se enfrentan a un dilema en las elecciones del 12 de diciembre: la visión socialista de Corbyn, que incluye una amplia nacionalización y servicios públicos gratuitos, o la campaña del actual primer ministro Boris Johnson de resolver el Brexit en cuestión de meses y construir una “economía de mercado dinámica”.
En un acto celebrado en la ciudad de Birmingham, en el centro de Inglaterra, Corbyn presentó su proyecto para satisfacer a amplios sectores de la población, ofreciendo algo para casi cada tipo de ciudadano en Reino Unido, desde ayudas a padres con hijos pequeños hasta educación universitaria gratuita y más fondos para el cuidado de ancianos.
En un discurso a menudo interrumpido por aplausos y ovaciones en pie por los presentes, Corbyn prometió defender a la ciudadanía de a pie de los “banqueros, multimillonarios y el establishment” que pretenden mantener un sistema que está “amañado a su favor”.
“El programa del Partido Laborista es un programa de esperanza, eso es lo que es este documento, un programa que traerá un cambio real”, dijo Corbyn. “Un programa lleno de políticas populares que la clase política ha bloqueado durante una generación.”
Por detrás de su principal rival en las encuestas, Corbyn espera que su mensaje de cambio ahogue las críticas a su postura sobre la salida de Reino Unido de la Unión Europea, que hasta algunos en su partido creen que carece de la claridad de la promesa de Johnson de “resolver el Brexit”.
En cambio, el líder laborista dice que en seis meses conseguirá que tener “listo” el Brexit, con un nuevo acuerdo de salida que se someterá a un segundo referéndum como una forma de mantener unido al país.
Con la intención de evitar comparaciones con el programa de inspiración socialista de 1983 del Partido Laborista, descrito posteriormente por un entonces parlamentario laborista como “la carta de suicidio más larga de la historia”, Corbyn rechazó las insinuaciones que estaba retornando a los años setenta.
En su lugar, propone “una revolución industrial verde”, un ambicioso plan que, según él, podría financiarse en parte gravando a los más ricos de Reino Unido.
El programa presentó un gasto adicional de 82.900 millones de libras esterlinas, compensado con un paquete de medidas de recaudación por valor de otros 82.900 millones de libras.
Tanto los Laboristas como los Conservadores de Johnson han prometido poner fin a la austeridad económica e invertir más dinero en servicios públicos de cara a las elecciones, las cuales serán decisivas sobre cómo, cuándo e incluso si finalmente se producirá el divorcio de Reino Unido con la Unión Europea.
Brandon Lewis, ministro conservador, dijo que el Partido Laborista llevaría a cabo “una oleada de imprudentes gastos que supondría un mazazo a la economía británica”.
La mayoría de las encuestas ponen al Partido Conservador al frente de la intención de voto, pero son pocos los capaces o dispuestos a predecir un vencedor en las elecciones.
Leader of the Labour Party Jeremy Corbyn speaks at the launch of the party manifesto in Birmingham, Britain November 21, 2019. REUTERS/Phil Noble Reuters