Lisa Monaco, asesora antiterrorista de Obama |
WASHINGTON/EDGARTOWN EEUU(Reuters) - Fuerzas de Estados Unidos intentaron rescatar al periodista James Foley y a otros rehenes estadounidenses durante una misión secreta en Siria e intercambiaron disparos con miembros del Estado Islámico antes de descubrir que los cautivos no estaban allí, dijeron funcionarios.
La misión, autorizada por el presidente Barack Obama y apoyada en datos de inteligencia estadounidense, se produjo en el verano boreal. Las autoridades revelaron esta misión un día después de la publicación de un video que mostraba a un extremista decapitando a Foley, de 40 años.
Los funcionarios no revelaron exactamente cuándo se produjo la operación, pero dijeron que no fue en las últimas dos semanas.
Los funcionarios dijeron que fuerzas especiales estadounidenses y otros efectivos militares, apoyados por helicópteros y aviones, entraron en la zona objetivo en Siria y se enfrentaron a tiros con miembros del Estado Islámico.
El incidente, en el que murieron varios extremistas, parecía ser el primer enfrentamiento directo en terreno entre Estados Unidos y el Estado Islámico, al que Obama considera una amenaza creciente en Oriente Medio.
Lisa Monaco, principal asesora antiterrorista de Obama, dijo en un comunicado que el mandatario autorizó la misión porque su equipo de seguridad estimó que los rehenes estaban en peligro con cada día que pasaba.
"El Gobierno de Estados Unidos tenía lo que creía era suficiente información de inteligencia, y cuando se presentó la oportunidad, el presidente autorizó al Departamento de Defensa que actuara de forma agresiva para recuperar a nuestros ciudadanos. Lamentablemente, esa misión no tuvo éxito porque los rehenes no estaban presentes", dijo Monaco.
Entre los rehenes a los que se buscaba figura también Steven Sotloff, periodista estadounidense al que se amenazó con decapitar en el mismo video que mostró la brutal ejecución de Foley.
Las familias de los rehenes fueron informadas de la operación, "pero sólo cuando fue operativamente seguro hacerlo", dijo un veterano responsable de la Administración.
El portavoz del Pentágono John Kirby dijo que la misión se centró en una "red particular de captores" dentro del Estado Islámico. No proporcionó detalles.
"Estados Unidos no tolerará el secuestro de sus ciudadanos, y trabajará sin descanso para asegurar su seguridad y para que los captores paguen por ello", declaró.