Unos 150 yihadistas del Estado Islámico se han rendido a las fuerzas kurdas Peshmerga en Khurmatu, en el norte de Irak. Después de liberar del control de Estado Islámico a una serie de pueblos en el área de Khurmatu, la cooperación entre las fuerzas iraquíes y las fuerzas Peshmerga contribuyó a la rendición de los islamistas.
Ali Abdulkarim, comandante de las fuerzas iraquíes en la zona de Khurmatu, dijo que un gran número de militantes del Estado Islámico murieron en los enfrentamientos y que sus cadáveres han quedado en las líneas del frente.
"Actualmente los 'peshmergas' y las fuerzas iraquíes están avanzando continuamente y solo 10 kilómetros les separan de la base principal del Estado Islámico en el oeste de Khurmatu", dijo Abdulkarim citado por BasNews.
El martes las fuerzas kurdas Peshmerga atacaron al Estado Islámico en Rabia, Zumar y Mosul, en el norte de Irak, y consiguieron tomar el control de Rabia, una localidad de vital importancia estratégica en la frontera con Siria.
El viernes funcionarios iraquíes informaron que un helicóptero de ataque Mi-35 del Ejército de Irak había sido derribado con un lanzacohetes por el grupo Estado Islámico entre las localidades de Beiji y Al Senniyah, en el norte de Irak.