Moscú, 11 de octubre, 2016 (AP). En medio de un enconado enfrentamiento por Siria, el presidente ruso Vladimir Putin aplazó por tiempo indeterminado un viaje a Francia después de que París revisó el programa de la visita y dijo que no quiere abordar otro tema que la crisis siria.
El presidente francés François Hollande dijo el martes que Putin aplazó su visita, prevista para la semana entrante, después de que el mandatario galo le dijo que no asistiría a la inauguración de la nueva iglesia ortodoxa rusa y que solo le interesaba hablar sobre Siria.
Durante el fin de semana, Rusia vetó una resolución del Consejo de Seguridad de la ONU propuesta por Francia y España para poner fin a las hostilidades en el país desgarrado y culpó a París por negarse a discutir una versión negociada. El lunes, el canciller francés Jean-Marc Ayrault pidió a la Corte Penal Internacional que investigue posibles crímenes de guerra rusos en Siria.
"Francia tiene un desacuerdo importante con Rusia sobre Siria", dijo Hollande. "Y el veto ruso de la resolución francesa en el Consejo de Seguridad de la ONU ha impedido el cese de los bombardeos, así como la proclama de un alto el fuego".
Con todo, opinó, el diálogo con Rusia es esencial para detener la masacre.
"Las víctimas principales son los civiles que viven y mueren bajo las bombas", dijo Hollande. "Es por eso que considero que es necesario un diálogo con Rusia, pero debe ser firme y abierto. En caso contrario... es una burla".
El viaje de Putin a París, previsto para el martes próximo, incluía la inauguración de un centro cultural ruso y una exposición, pero la parte francesa alteró el programa, dijo el vocero del Kremlin, Dmitry Peskov.
"Lamentablemente, esos eventos desaparecieron del programa", dijo Peskov y añadió que correspondía a los franceses explicar el motivo. "El presidente decidió cancelar la visita".
Peskov dijo que Putin podría visitar Francia en una fecha posterior que le resultara "cómoda" a Hollande. Negó que la cancelación de la visita reflejara un aislamiento internacional creciente de Moscú debido a sus acciones en Siria, donde sus aviones apoyan la ofensiva del ejército sirio en Alepo.