WASHINGTON (AP) -- Los interrogantes sobre la relación de Donald Trump con Rusia han sido una constante de la campaña presidencial. ¿Por qué insiste en elogiar a Vladimir Putin? ¿Interfiere Rusia con las elecciones estadounidenses? ¿Hay alguna investigación del FBI?
Lo que se sabe del tema a escasos días de la votación para elegir un nuevo presidente de Estados Unidos:
LAS PALABRAS DE TRUMP
Trump ha causado asombro varias veces al elogiar las condiciones de líder del presidente ruso y promover una relación más estrecha con Rusia a pesar de sus antecedentes en el terreno de los derechos humanos y de recientes incursiones militares en Ucrania y Siria.
"Al menos es un líder en serio", dijo Trump a MSNBC al hablar de Putin en diciembre pasado, "a diferencia de lo que tenemos en este país".
Trump a menudo se queja del estado de las relaciones entre Estados Unidos y Rusia y afirma que sería bueno que los dos países hiciesen a un lado sus diferencias y trabajasen juntos para combatir a la organización Estado Islámico. Esto a pesar de que Rusia apoya al presidente sirio Bashar Assad, al que Estados Unidos se opone.
"No conozco a Putin, pero ¿no sería bueno si pudiésemos entendernos con otro país?", preguntó Trump en un acto el domingo pasado. "Quieren deshacerse del EI. Nosotros queremos deshacernos del EI. Unamos fuerzas y démosle palos al EI".
En los últimos días Trump ha intensificado sus críticas a su rival Hillary Clinton por ser demasiado dura con Putin.
"Habla muy mal de Putin y no creo que eso sea inteligente", sostuvo hace poco en un acto en Ohio. "¿Cómo puede hablar tan mal de alguien?".
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¿QUÉ TIPO DE RELACIÓN TIENEN TRUMP Y PUTIN?
Trump ha hecho declaraciones contradictorias acerca de su relación con Putin. Le dijo a ABC en julio no tenían relación alguna ni recordaba haberse reunido nunca vez con él. Pero en años previos varias veces dijo lo contrario.
"Tengo una relación con él", afirmó en una entrevista en Moscú en el 2013.
La entrevista de ABC en la que Trump dijo que "nunca me vi" con Putin contradijo otras que hizo en el 2015 con el presentador radial Michael Savage.
Savage le preguntó si alguna vez se había visto con Putin, y Trump respondió: "sí, una vez, sí. Hace mucho tiempo".
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LOS COLABORADORES DE TRUMP
A lo largo de su campaña Trump ha contratado a varios asesores con estrechos lazos con Rusia, incluido el ex director de su campaña Paul Manafort.
Trump lo contrató en marzo. Manafort es un cuadro republicano que asesoró por años a un partido político ucraniano pro-ruso hasta que fue derrocado en medio de denuncias de corrupción. Un allegado suyo, Rick Gates, se hizo cargo en la práctica del manejo de la campaña en junio.
Dado que el Partido Republicano tiene una postura bastante dura hacia Rusia, la historia de Manafort lo puso constantemente en el candelero.
En agosto el New York Times informó que había un libro de cuentas escrito a mano que detallaba pagos en efectivo del gobierno ucraniano y que incluía el pago de 12,7 millones de dólares a Manafort. Fiscales ucranianos dicen que los pagos eran un esfuerzo por disimular sobornos.
Pocos días después la Associated Press dijo que Manafort y Gates habían montado una operación secreta para hacer lobby a favor de Ucrania en Washington. Gente que participó en la operación afirmó que se trató de ocultar el hecho de que el partido gobernante pro-ruso estaba detrás de esa campaña haciendo los pagos a través de una organización sin fines de lucro.
Manafort y Gates niegan haber estado involucrados en ese lobby. Pero correos electrónicos conseguidos por la AP muestran que Gates le dio instrucciones a los integrantes del lobby.
Manafort se desvinculó de la campaña de Trump al día siguiente.
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LOS HACKERS RUSOS
Dirigentes del Partido Demócrata se dieron cuenta en abril de que sus sistemas habían sido penetrados por software malicioso. Una empresa de ciberseguridad, CrowdStrike Inc., encontró rastros de al menos dos grupos de hackers sofisticados en la red de los demócratas, ambos vinculados al gobierno ruso.
Esos hackers obtuvieron al menos un año de correos, conversaciones e investigaciones sobre Trump, de acuerdo con una persona al tanto de lo sucedido que pidió no ser identificada por no estar autorizada a hablar del tema.
También fueron hackeados miles de mensajes de dirigentes demócratas, entre ellos los del director de la campaña de Clinton John Podesta. La gente de Clinton dijo que el gobierno le informó que estaba investigando la posibilidad de que elementos de Rusia hayan sido responsables del hackeo de la cuenta de Podesta.
Los emails de Podesta fueron distribuidos por WikiLeaks y plantean numerosas preguntas en torno a las posturas de Clinton, su selección de personal y sus vínculos con la fundación benéfica de su marido.
La Oficina del Director de Servicios de Inteligencia y el Departamento de Seguridad Nacional han acusado formalmente a hackers del gobierno ruso por los ataques al Partido Demócrata en un esfuerzo por tratar de influir en las elecciones presidenciales.
Trump, por su parte, dice que no hay pruebas de que Rusia esté involucrada y no parece considerar demasiado grave el que una potencia rival trate de influir en las elecciones. En una ocasión le pidió a Rusia que encuentre los emails que destruyó Clinton. Posteriormente dijo que se trató de una broma.
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LA REACCION DEL FBI
Los demócratas han estado pidiendo que se tomen medidas.
Pero no está muy claro lo que hace el FBI.
El senador demócrata Harry Reid acusó al director del FBI James Comey de contradecirse al discutir públicamente la investigación de los correos que Clinton envió usando un servidor privado cuando era secretaria de Estado mientras no confirma si está investigando los vínculos de Trump y sus allegados con Rusia.
El New York Times dijo que el FBI había estado estudiando esos lazos y no había encontrado nada irregular. Una portavoz del FBI se negó a hablar del tema.
Los rusos, Putin incluido, niegan estar inmiscuyéndose en las elecciones de Estados Unidos.