NUEVA YORK, EEUU (Reuters) - Un hombre que manejaba una camioneta alquilada arrolló a peatones y ciclistas en Nueva York el martes, matando a ocho personas entre las que se encontraban cinco ciudadanos argentinos, en lo que autoridades estadounidenses calificaron como un acto de terrorismo.
El conductor de 29 años recibió un disparo de la policía en el abdomen y fue detenido luego de que estrelló la camioneta contra un autobús escolar y abandonó su vehículo, dijo en conferencia de prensa el comisionado de la policía de Nueva York, James O‘Neill.
La cancillería argentina informó en un comunicado que cinco ciudadanos argentinos fallecieron en el ataque y otro resultó hospitalizado. Las víctimas se encontraban en una celebración en Nueva York.
“Los compatriotas, oriundos de la ciudad de Rosario, integraban un grupo de amigos que celebraban el 30° aniversario de egresados de la Escuela Politécnica de esa ciudad cuando ocurrió el trágico hecho”, dijo el comunicado de la cancillería.
Los cinco ciudadanos argentinos fallecidos fueron identificados por la cancillería como Hernán Diego Mendoza, Diego Enrique Angelini, Alejandro Damián Pagnucco, Ariel Erlij y Hernán Ferruchi, Sus edades no fueron reveladas.
Un portavoz del Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos calificó al incidente como un “aparente acto de terrorismo”.
Un funcionario de seguridad dijo a Reuters que el sospechoso es un inmigrante de origen uzbeko.
O‘Neill aclaró que por ahora la policía no identificará al conductor. El gobernador Andrew Cuomo dijo por su parte que el atacante pareció actuar solo.
El conductor ingresó a la vía para bicicletas en el sur de Manhattan a las 15.05 hora local, dijo O‘Neill, y agregó que él estaba armado con un arma para disparar balas de pintura y una pistola de perdigones.
El jefe policial señaló que el sospechoso conducía una camioneta alquilada de Home Depot, pero que no diría por ahora dónde fue rentada.
De las ocho personas muertas, seis fallecieron en el lugar del ataque y otras dos en un hospital cercano, agregó O‘Neill.
El comisionado de bomberos Daniel Nigro dijo que 11 sobrevivientes que sufrieron heridas graves pero sin riesgo para sus vidas fueron trasladados a hospitales.
John Williams, un testigo de 22 años, dijo a periodistas en la escena que escuchó cinco disparos antes de ver a la policía llevarse a un hombre detenido. “Parecía muy calmado, no se resistía”, destacó.
La policía no confirmó que se produjeran disparos, más allá de los de sus propios agentes. N. York