BRUSELAS (Reuters) - La Unión Europea y Reino Unido están avanzando hacia una declaración legal en la que el bloque insistirá nuevamente en la naturaleza temporal de la denominada “salvaguarda” del Brexit para la frontera irlandesa, dijeron diplomáticos en Bruselas.
Los enviados hablaron de una “declaración paralela” o “instrumento interpretativo” sobre la salvaguarda, un día después de que la primera ministra británica Theresa May y el jefe del ejecutivo de la Unión Europea, Jean-Claude Juncker, se reunieron en Bruselas para buscar una salida al estancamiento del Brexit.
La salvaguarda irlandesa o “backstop” es una mecanismo de seguro para evitar que después del Brexit se restaure una frontera física con controles entre la República de Irlanda, país miembro de la UE, e Irlanda del Norte, territorio británico.
Algunos diputados británicos temen que este mecanismo pueda atrapar al país en una unión aduanera permanente con la UE.
“También estamos considerando actualizar la declaración sobre los futuros lazos entre la UE y Reino Unido después del Brexit para dar más importancia a los ‘mecanismos alternativos’ que quiere Reino Unido”, dijo un diplomático de la UE que se ocupa del Brexit. “Pero May no tendrá un texto concreto antes del 28 de febrero”.
Un segundo diplomático, con conocimiento de las conversaciones que mantuvieron May y Juncker el miércoles por la noche, confirmó que, antes de una próxima votación sobre el Brexit en el Parlamento británico, la UE solo señalaría que esta es la dirección de trabajo.
“Primero, el Parlamento debe indicar claramente que esta opción obtendría su apoyo de cara a la ratificación del acuerdo del Brexit. Si lo hacen, afinaremos las palabras exactas en la segunda semana de marzo y se enviarán a la cumbre para su aprobación”.
De lo contrario, la cumbre de todos los líderes nacionales de la UE que se realizará el 21 y 22 de marzo en Bruselas, tendría que acordar un retraso en el Brexit más allá de la fecha prevista (29 de marzo), según las fuentes, con el fin de retrasar el peor escenario posible, es decir, una escisión abrupta sin acuerdo entre Londres y Bruselas. | Reuters