LONDRES/BRUSELAS (Reuters) - Reino Unido y la Unión Europea rechazaron el jueves las posibilidades de lograr un acuerdo inmediato sobre el Brexit, pero diplomáticos dijeron que sus posiciones se están acercando hacia un compromiso legal que la primera ministra Theresa May espera sea aprobado por el Parlamento británico.
May está tratando de lograr cambios en el paquete de divorcio antes de someterlo a otra votación parlamentaria. Si fracasa, la líder conservadora tendrá que decidir si retrasar el Brexit o poner en peligro a la quinta economía más grande del mundo y sacar al país del bloque sin un acuerdo el 29 de marzo.
El ministro de Finanzas británico, Philip Hammond, despertó las expectativas de que un acuerdo revisado estaba dentro de las posibilidades, al decir que los legisladores podrían tener la oportunidad de votar el nuevo pacto la próxima semana.
Pero a las pocas horas de los comentarios de Hammond, una fuente del Gobierno británico que habló bajo condición de anonimato restó importancia a la probabilidad de alcanzar un acuerdo dentro de unos días.
“No parece que tengamos un acuerdo la próxima semana”, dijo la fuente.
El mayor problema para May es la llamada salvaguarda irlandesa, una suerte de póliza de seguro que busca mantener abierta la frontera entre la provincia británica de Irlanda del Norte e Irlanda, un miembro de la UE, en caso de que un futuro acuerdo comercial no esté a la altura después del Brexit.
El Parlamento británico le ordenó a May reemplazar este mecanismo -denominado backstop- y reabrir el acuerdo de salida, pero esto fue descartado por la UE.
DECLARACIÓN PARALELA SOBRE BACKSTOP
Diplomáticos dijeron que las dos partes están avanzando hacia una declaración legal separada en la que el bloque podría volver a destacar el carácter temporal de la salvaguarda para la frontera irlandesa.
Los enviados hablaron de una “declaración paralela” o “un instrumento interpretativo” sobre la salvaguarda, un día después de que May y el jefe del brazo ejecutivo de la Unión Europea, Jean-Claude Juncker, se reunieron en Bruselas para buscar una salida del punto muerto en torno al Brexit.
“También estamos analizando actualizar la declaración sobre los lazos futuros entre la UE y Reino Unido después del Brexit para dar mayor importancia a los ‘acuerdos alternativos’ buscados por Reino Unido”, dijo un diplomático de la UE que negocia el Brexit. “Pero May no firmará nada antes del 28 de febrero”.
Londres está buscando garantías legales que muestren que la salvaguarda irlandesa es solo temporal, una de las principales preocupaciones de muchos partidarios del Brexit, que temen que Reino Unido pueda verse encerrado en las normas de la UE indefinidamente por esta póliza de seguro.
May ha prometido dar a los legisladores la oportunidad de decidir qué hacer sobre el Brexit el 27 de febrero, a menos de que logre revivir su acuerdo.
Un segundo diplomático cercano a las conversaciones entre May y Juncker confirmó que la UE sólo dará a conocer el estado del proceso antes de que la primera ministra enfrente otra votación parlamentaria.
“El Parlamento necesita primero especificar claramente que esta opción más tarde podría ser apoyada mediante una ratificación del acuerdo del Brexit. Si lo hace, afinaremos las palabras exactas en la segunda semana de marzo y éste (el acuerdo) irá a la cumbre para su aprobación”, sostuvo. | Reuters