Bruselas (EuroEFE).- Los líderes de la Unión Europea abogaron este jueves por consolidar sus esfuerzos para controlar las fronteras externas del bloque y, en particular, los flujos migratorios en el Mediterráneo central, en una cumbre donde también se abordaron la política exterior, la digitalización y la salida del Reino Unido de la UE.
"Tenemos una oportunidad real de cerrar la ruta del Mediterráneo central", dijo en una rueda de prensa el presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, quien precisó que los líderes acordaron ofrecer más apoyo a Italia para su trabajo con las autoridades libias para controlar la inmigración ilegal en esta ruta.
Más financiación
"Por ello hemos decidido que los Estados miembros proporcionarán suficiente financiación para la ventana dedicada al Norte de África del Fondo Fiducidario para África", afirmó Tusk, quien señaló que en "unas semanas" deberían verse "resultados concretos" de esta contribución, cuya cuantía no precisó.
Sin embargo, el presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, que compareció ante la prensa junto a él, criticó que hasta ahora los Estados solo han comprometido 175 millones en ayuda a África para este fin.
"Esto claramente no es suficiente, y si queremos estar tan presentes como sea posible en el Norte de África tenemos que aumentar los medios financieros", dijo.
En las conclusiones sobre inmigración adoptadas este jueves, los jefes de Estado y de Gobierno señalaron que se están reduciendo los flujos migratorios y el número de muertes en el mar y pidieron también disminuir "los incentivos para la inmigración ilegal" mediante retornos "efectivos".
Reforma del sistema de Berlín
También en materia de inmigración, los Veintiocho acordaron que abordarán en diciembre la reforma del sistema de Dublín -la legislación que rige las demandas de asilo en la UE-, con el objetivo de alcanzar un consenso en la primera mitad de 2018, según explicó Tusk.
Por otra parte, los líderes de la UE respaldaron que los países que deseen colaborar más en Defensa por medio de la llamada cooperación estructurada permanente (PESCO) lo notifiquen "rápidamente", de manera que esta pueda iniciarse "antes de finales de año".
Este sistema permite que si una mayoría cualificada de países está de acuerdo para colaborar en una materia puedan hacerlo sin necesidad de que se sumen los 28, y España es, junto a Francia, Alemania o Italia, una de sus principales defensoras.
Mercado Único Digital a finales de 2018
Los Veintiocho también instaron a acelerar la "digitalización" de Europa con vistas a conseguir el llamado Mercado Único Digital a finales de 2018, para lo cual subrayaron la necesidad de llegar a acuerdos con la Eurocámara sobre las propuestas de geobloqueo en internet, servicios audiovisuales o comunicaciones electrónicas.
También instaron a adoptar un "enfoque común" en ciberseguridad, pidieron a la CE que presente un "enfoque europeo sobre inteligencia artificial" a principios del año próximo y llamaron a trabajar "rápido" hacia nuevas medidas fiscales para empresas digitales.
Tras la primera sesión de trabajo, en la que se abordaron estas tres áreas, los líderes tuvieron una cena de trabajo centrada en política exterior.
Respaldo al acuerdo nuclear iraní y a sanciones a Corea del Norte
Los Veintiocho mostraron su respaldo al acuerdo nuclear con Irán reafirmando la declaración adoptada el pasado lunes por sus ministros de Exteriores, en la que se comprometieron a "continuar la implementación total y efectiva de todas las partes del acuerdo".
El pacto fue firmado por las potencias del Grupo 5+1 (EEUU, Francia, el Reino Unido, China, Rusia y Alemania) con Irán para garantizar que su programa nuclear sea pacífico, pero el Gobierno estadounidense de Donald Trump lo ha puesto en entredicho.
Los líderes mostraron también su apoyo a las nuevas sanciones económicas adoptadas de forma autónoma por la UE contra Corea del Norte por sus pruebas de armas nucleares y de misiles balísticos.
Por otra parte, la primera ministra británica,
Mención al "brexit"
Theresa May, informó durante la cena a sus todavía socios sobre su percepción del rumbo de las negociaciones para el "brexit", en vísperas de que los países adopten mañana en un encuentro a Veintisiete -sin Reino Unido- conclusiones sobre las mismas.
En estas, los líderes constatarán que no se han conseguido progresos suficientes para pasar a la segunda fase de la negociación, dedicada a la futura relación entre ambas partes, pero señalarán que hay avances "prometedores" por lo que los Veintisiete podrán empezar sus "trabajos preparatorios" para esta etapa, según fuentes europeas.
Aunque no estaba en la agenda y no se abordó oficialmente, el tema de Cataluña planeó sobre la reunión.
La posición de las instituciones de la UE y los Estados miembros "está clara en cuanto a que no hay espacio para ningún tipo de mediación o de iniciativa o acción internacional", dijo Tusk, quien reconoció, no obstante, que "la situación en España es preocupante". euroefe.